El 21 de Julio se estrenó en Netflix la segunda temporada de la comedia dramática adolescente alemana, Cómo Vender Drogas Online.
Creada por Philipp Käßbohrer y Matthias Murmann, Cómo Vender Drogas Online estrenó su primera temporada el 31 de mayo de 2019. La ficción se centra en Moritz Zimmermann, interpretado por Maximilian Mundt, un joven que intenta recuperar a su exnovia, que lo dejó por un traficante de drogas de pacotilla de la escuela. Su solución, vender mejores drogas que su rival amoroso, y ganar mucho dinero en el camino para impresionarla.
No decepciona
Cómo Vender Drogas Online resultó ser una estupenda sorpresa en su primera temporada. Una serie que podría pasar desapercibida entre el resto de títulos del amplio catálogo de Netflix, pero que sin duda podríamos definir como imprescindible.
El humor, la critica social, la historia y los personajes forman una combinación que encaja de maravilla y que además funciona. Muchos la asocian con series al estilo Breaking Bad, pero lo cierto es que Cómo Vender Drogas Online ha conseguido encandilar al público, creando su propia personalidad.
Emotiva y divertida. Su primera parte se cerró de forma tal, que el espectador no podía evitar pensar en una segunda. Y así fue, la segunda ya se ha estrenado al fin; y después de verla, el resultado a sido muy satisfactorio.
No pierde esencia y evoluciona
Esta segunda temporada de Cómo Vender Drogas Online se ha desarrollado muy cuidadosamente, para ofrecer un buen espectáculo, lleno de sorpresas. Tiene un ritmo muy fluido y que no llega a aburrir o cansar, gracias en parte a que los episodios de ambas temporadas no tienen una larga duración.
Esta nueva parte no pierde el carisma y la gracia de la primera, sino todo lo contrario. Se nota que existe una evolución constante, tanto de la historia como de los personajes, que se desarrollan para bien o para mal, pero siempre en favor de hacer la trama interesante. Podemos ver como el protagonista principal comienza como un Nerd deprimido, y se termina transformando en un experto traficante, que sigue siendo un Nerd, pero ahora con dinero y más experiencia social. Así pasa con el resto de personajes, que cada cual a su manera y tomando su propio camino, evolucionan y se transforman también.
El final de esta temporada nos ha dejado muchas sorpresas, y mucho que pensar y que analizar. Desde luego, nos ha abierto el camino para una nueva etapa, y nos ha dejado con los dientes largos, deseando saber más.
Humor, pero también crítica
Cómo Vender Drogas Online tiene un sentido del humor muy peculiar, pero efectivo. Sin embargo, esta serie no está falta de critica social, ni mucho menos, y con su estilo personal, consiguen que nos demos cuenta de muchas cosas.
El abuso de las redes sociales y dispositivos móviles por parte de los jóvenes, y las consecuencias y emociones que provoca su uso constante. Las relaciones tóxicas entre los adolescentes, las mentiras y desconfianzas entre amigos y parejas, los lazos que unen a las personas.
Y por supuesto, no nos podemos olvidar de como abordan las consecuencias del uso y exceso de las drogas. De hecho este tema incluso lo llevan hasta tal punto que no solo ofrecen escenas que representan lo que podría suceder, sino que cuentan ademas con ciertas explicaciones a modo informativo, que resultan muy aclarativas.
Romper la cuarta pared siempre funciona
En cada capítulo de Cómo Vender Drogas Online se pueden ver siempre varias escenas en las que, sobre todo el protagonista, se dirige directamente al público.
Este ha sido un recurso muy utilizado en series y películas estos últimos años, y la verdad es que sigue funcionando. Informan al público de lo que sucede, con cierto humor, como si hicieran una pausa en la historia para ayudarnos a analizar la situación, o simplemente hacer comentarios oportunos sobre la escena en cuestión.
Que no cese, pero que no se pasen, que luego ya se sabe de los excesos.
Conclusión de la segunda temporada de Cómo Vender Drogas Online
Esta segunda temporada de Cómo Vender Drogas Online ha resultado ser una estupenda evolución de la primera; a diferencia de como suele suceder en tantas otras series. Su humor, su critica social, los personajes y la historia se combinan de maravilla y nos enganchan una vez más, para seguir sorprendiendo. Es entretenida y muy fluida, y eso es debido en cierto modo también por la corta duración de sus episodios, lo que hace que no se vuelva aburrida o cargante.
Desde el principio hasta el sorprendente e ingenioso final, nos mantiene con la vista centrada en la pantalla, deseando saber más. Es uno de esos títulos que puede no destacar entre el amplio catálogo que ofrece Netflix, pero que sin duda merece un gran reconocimiento.
Nota
9,5/10
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